31 julio, 2006

La nada



Estar en el "vacío" puede ser desorientador e incluso asustar. No hay nada a qué aferrarse, no hay sentido de dirección ni siquiera una indicación de qué elecciones y posibilidades pueden encontrarse más adelante. Sin embargo, fue este estado de potencialidad pura el que existió antes de que se creara el universo.

Todo lo que puedes hacer ahora, es relajarte en esta vacuidad... caer en el silencio entre palabras... observar este espacio entre la respiración que entra y la respiración que sale y atesorar cada momento de la experiencia. Algo sagrado está a punto de nacer.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Será el vacío una oportunidad para crear?